“Si no puedes explicarlo de forma simple, es porque no lo entiendes bien”. Albert Einstein.
A lo largo de tu vida te ofrecerán “oportunidades” en un sinfín de proyectos y en muchas ocasiones te será difícil comprender perfectamente el modelo de negocio que te plantean. Si no entiendes algo perfectamente, no te metas. ¿Por qué? Porque en el mundo de las presentaciones de venta y en el mundo de las proyecciones financieras todo es perfecto o está planeado, pero en la realidad ningún proyecto puede prever todas las posibilidades que existen de que las cosas no vayan como uno espera, y cuando inviertes en algo que no comprendes perfectamente puedes llevarte sorpresas de cosas que jamás hubieras siquiera imaginado.
Las empresas que cotizan en bolsa, principalmente las que cotizan en las bolsas de USA, están obligadas por ley a listar los riesgos de invertir en sus acciones, de forma que todos los riesgos conocidos por los directivos deben ser transmitidos a los posibles inversionistas de manera transparente y pública, aunque la obligación es solo para los riesgos conocidos y existen muchos riesgos desconocidos que eventualmente pueden materializarse, además de otros que son conocidos pero que las empresas minimizan para no asustar a los posibles inversionistas. En las empresas privadas no existe ni siquiera esta información y quienes están ofreciendo oportunidades normalmente no transmiten con claridad todos los posibles riesgos porque eso limitaría de forma importante la cantidad de gente a la que lograrían convencer de invertir con ellos.
Entender en lo que se invierte va mucho más allá de solo entender el concepto general del negocio, hay que estar familiarizado con la industria en lo general y con la dinámica comercial de ese sector, hay que comprender cómo se gana y se pierde el dinero en ese negocio específico y cuáles son las fortalezas y debilidades de los diferentes competidores; pero sobretodo hay que entender el modelo de negocio de tal forma que puedas explicárselo a un niño de 6 años de edad con total facilidad.
“Si no puedes explicárselo a un niño de 6 años es porque entonces tú no lo entiendes”. Albert Einstein.
No invertir en lo que no entiendes es uno de los Principios de la riqueza que enseño en mi libro "¿Quieres ser Millonario? Yo te enseño". Si quieres saber más, cómpralo en esta web o en cualquiera de los canales de distribución autorizados.
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