¿Sabes cuál es el resultado de escribir en Google el nombre de una mujer seguido de la palabra hallada?
Ejems: Adriana hallada, Ivón hallada, Paulina hallada.
Los resultados de Google son todos iguales. Feminicidios o violencia de parte de un hombre hacia una mujer. Haz la búsqueda y sorpréndete como me sorprendí yo esta semana que me hicieron ver esta realidad. Pon el nombre que quieras, yo no encontré ninguno dónde los resultados no fueran artículos o notas sobre asesinatos, violencia o desapariciones.
Y si bien hacer el ejercicio con el nombre de hombres en lugar de mujeres también arroja resultados sobre asesinatos, hay una diferencia muy importante; y es que en el caso de los hombres son problemas relacionados con la violencia que impera en nuestro país, temas sobre asaltos, secuestros por dinero o venganzas, pero en el caso de las mujeres la mayoría de las notas no son por esos temas sino por desapariciones, violaciones, asesinatos cometidos por sus parejas y en general por violencia del sexo masculino hacia el sexo femenino.
El día de ayer fue el Día Internacional de la Mujer y en México lo celebramos con varias marchas de mujeres a nivel nacional, todas enmarcadas por el miedo aún para acudir a estas marchas. Me parece terrible que las mujeres tengan que pasar por lo que pasan en nuestro país y que aún para ir a una marcha tengan que tomar precauciones para que no les hagan nada o de plano mejor no ir. Estoy convencido de que muchas mujeres que habrían ido de haberse sentido seguras no lo hicieron precisamente por esta falta de seguridad que sentimos todos en este país, pero que desde luego es mucho peor para ellas.
Como en todas las marchas y este tipo de movilizaciones, hubo cosas malas. Mujeres que vandalizaron comercios y monumentos y que agredieron a policías y reporteros. Esto desde luego está mal y es reprochable, pero no podemos quitar mérito a un movimiento sincero y positivo por las malas actuaciones de unas cuantas personas. Quienes vandalizan siempre utilizan la misma metodología sean hombres o mujeres, se tapan la cara y se dedican a destruir y provocar. Es una pena que en algo tan importante haya esto, pero hay que ser conscientes que así es y no por eso quitar mérito a este gran movimiento.
Volviendo al tema principal, según datos del reporte Las mujeres en el mercado laboral mexicano, en México hay mas de 65 millones de mujeres, pero su participación laboral es menor a la de otros países latinoamericanos como Brasil, Costa Rica o Chile. ¿Es esto parte del mismo problema?
El mundo ha mejorado en todo aspecto y desde luego hoy hay menos machismo y desigualdad de la que había antes, pero hay mucho, muchísimo que hacer para nivelar completamente el terreno de juego. La herencia histórica de todas las religiones que por siglos han imperado como norma moral en muchas partes del mundo -y desde luego en México- ha tenido a la mujer en un nivel que para muchas áreas de la vida ha estado por detrás o debajo del de los hombres. Está claro que los libros bajo los que se rigen las que por muchos siglos fueron las 3 principales religiones del mundo fueron escritos por hombres y que por eso hay herencias históricas que han puesto a la mujer por detrás del hombre para muchas normas sociales que desde niños hemos visto como algo normal, algo que afortunadamente está cambiando.
¿Te parece lógico que los curas sean sólo hombres?, ¿Te parece razonable que los cardenales y por lo tanto el Papa tengan que ser sólo hombres? Pero esto no es sólo un problema de la religión católica, en el judaísmo pasa exactamente lo mismo. Para las mujeres musulmanas es aún peor, ya que hay reglas que claramente las ponen en un escalón social muy por debajo del hombre.
Pero fuera del mundo religioso se viven unas reglas -escritas y no escritas- similares. En el mundo corporativo pasa exactamente lo mismo. De las 500 empresas que componen el índice bursátil S&P500, tan sólo 30 tienen una mujer como Director General. Aquí el link donde puedes consultar esta información.
¿Crees que los hombre somos más capaces para dirigir empresas que las mujeres? Esta pregunta es meramente retórica, yo estoy convencido que no.
Las mujeres quieren que esto cambie y nosotros los hombres deberíamos quererlo también, pero el problema de esto, como el de muchos cambios que pretenden romper con el status quo, es que harán el mundo más difícil para los que teníamos ventaja y eso hace que muchos lo rechacen. Y lo más difícil es que las mujeres que quieren una verdadera igualdad luchan también contra otras mujeres que por educación o por cultura o por lo que sea, ven con malos ojos a las mujeres que buscan la igualdad y las catalogan de feministas en plan despectivo, como si eso fuera algo malo.
Hoy es el paro nacional de mujeres, el 9 nadie se mueve es el slogan con el que las mujeres se han convocado a sí mismas a no salir a la calle, a no consumir, a no participar en sociedad por un día. A mí me parece increíble la época que estamos viviendo en el mundo para muchas cosas y esta desde luego es una de ellas.
No sé qué tanto éxito tendrá el paro, pero me encantaría que fuese un parteaguas cultural para la lucha por la igualdad de la mujer en México.
Para muchas personas las cosas no estaban mal, pero es precisamente creando conciencia, haciendo ruido, haciendo que la gente se dé cuenta que las cosas no están bien como se logran los cambios. Este tipo de cambios toman mucho tiempo y es típico que las generaciones que empiezan la lucha no disfruten de los frutos conseguidos por su esfuerzo, pero para que las cosas cambien tiene que haber gente dispuesta a reclamar ese cambio, gente dispuesta a exigir justicia de género aún cuando los resultados no les beneficien a ellas directamente.
Yo veo muy bien las marchas de ayer, veo muy bien el paro de hoy y veo muy bien que los hombres nos hagamos conscientes de las deficiencias que tiene nuestra sociedad y que tenemos nosotros mismos como hombres para entender que hombres y mujeres somos iguales y tenemos los mismos derechos.
El reto para nosotros los hombres es entender como podemos participar de este cambio y como podemos aportar sin que nuestra educación machista nos haga no darnos cuenta que aún cuando muchas veces creemos estar ayudando, estamos sólo siendo condescendientes con las mujeres.
Maravilloso artículo!!! Ojalá y todos pensarán como tú!